Hibernando

Foto: Abel Laborda. Noviembre 2017

Esta semana me han dicho que estaba perdido… y tenían parte de razón. No es que nadie que quisiera encontrarme no pudiera hacerlo, pero es verdad que hay épocas en que tu imagen pública se ve francamente reducida.

Y no es que no estuviera haciendo nada, sino que al igual los árboles que pierden las hojas en invierno para resurgir en primavera o los osos que hibernan durante el invierno, hay épocas en las que el trabajo es interior, privado, oculto, un trabajo de creación en el que elaboras un germen que, con el tiempo y las condiciones adecuadas, debería florecer (primero) y dar sus frutos (despúes). Y en esas estamos, preparando un montón de cosas que esperemos vayan creciendo y completándose y puedan ver la luz próximamente.

Mientras tanto, si no me veis, ya sabéis donde encontrarme.

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